Los agricultores del siglo XlX fueron abandonando cultivos de secano (cereales) para dar paso a la siembra de la parra, siendo la producción de uva de mesa una de las más importantes de toda la provincia de Almería.Su comercialización, no exenta de una fuerte elaboración (faenas), permitió a los agricultores ejidenses presentarse en los más importantes mercados fruteros del mundo (Berlín, Londres, Nueva York,etc).
El origen de la agricultura intensiva almeriense se sitúa a finales de los años cincuenta y comienzos de los sesenta en el Campo de Dalías. En esta época comenzaron a implantarse las primeras estructuras de invernadero con cubiertas de plásticos y cultivos en enarenado. Sin embargo, no fue hasta la década de los 60 cuando se extendió la superficie invernada de forma generalizada por toda la zona de Poniente y Levante de Almería, gracias al trabajo de miles de familias que abandonaron los pueblos del interior en busca de una mejora económica en el litoral.
Comparación aérea entre los años 1970-2014 en El Ejido
La agricultura del interior ya estaba en retroceso y los buenos resultados de los primeros invernaderos propiciaron el interés de los habitantes de varias zonas de la provincia, principalmente “La Alpujarra” almeriense y granadina, por implantarse en un territorio aparentemente desértico.
Inicios en la agricultura almeriense
El Instituto Nacional de Colonización realizó una importante labor de desarrollo, creando pozos y canales para la distribución de agua, y dotando a estas personas de “parcelas”, que comprendían una extensión de tierra y una casa, para que iniciaran la actividad agrícola.
La ayuda familiar fue y es clave en este modo de vida. No fue hasta la década de los ochenta cuando llegaron los primeros inmigrantes procedentes del norte de África, para cubrir las necesidades laborales de los agricultores. Las excelentes condiciones climáticas de este territorio para la práctica(tema que abordaremos más adelante con una entrada específica), el desarrollo de los cultivos de regadío bajo plástico y en enarenado, así como la buena aceptación de los productos hortofrutícolas en el mercado exterior han propiciado que esta actividad se consolide como la más dinámica de la estructura económica almeriense. El crecimiento experimentado por la agricultura propició el desarrollo del espacio litoral, gracias a la concentración de población, riqueza y actividad económica.
familia visitando explotación agricola en 2013
Os dejo un link sobre un video de youtube en el que personas que vivieron ese auge en este campo nos cuentan como lo vivieron ellos.
https://www.youtube.com/watch?v=wKfHpfuK8M4
En primer lugar, enhorabuena por la iniciativa, suerte y ánimo con el proyecto. Me puedes contar como fiel seguidor.
ResponderEliminarEn segundo lugar, me gustaría hacerte una puntualización, si me lo permites y sin ánimo de ofensa ni pedantería sino simplemente de dejar las cosas tal cual son, cuando te refieres a los agricultores "ejidenses" del siglo XIX y primera mitad del XX en realidad eran dalienses, no sólo porque la mayoría vivían en el pueblo de Dalías sino porque también el territorio que después es El Ejido, en aquellos tiempos también era Dalías, de hecho no dejó de serlo hasta 1981. Sólo hay que mirar los DNI de aquellos agricultores y de sus hijos. Muchas gracias.
Gracias Viña Lagar por visitar el blog por hacerte fiel seguidor..
ResponderEliminarRespecto a la puntualización que me haces decirte que tienes toda la razón y no era mi intención crear ninguna polémica, sino que me refiero a El Ejido, conforme a las tierras que actualmente posee el municipio independientemente de que antes en sus inicios fueran pertenecientes al campo de Dalías, gracias de nuevo por tu aportación al blog y espero que te resulte interesante.. saludos